En el año de 1978 surgió uno los mejores discos de Kraftwerk, que innovaron desde la década de los 70, imponiendo nuevos estilos aun incomprendidos en esos tiempos.
The Man Machine trajo consigo una ola de nuevas tecnologías, modas y estilos de imponer la música electrónica que ya se venía gestando desde el francés Jean Michel Jarre, esto se ve reflejado en la portada del disco la cual muestra a estos jóvenes alemanes totalmente estéticos e inertes como si fueran unos mismísimos robots y eso se complementa en su primer track cuando lo único que vocalizan es “We Are The Robots”.
“Space Lab” es una invitación a la ciencia ficción que se vivía a finales de los 70 en Europa, mostrando varios audiovisuales en sus presentaciones sobre imágenes espaciales que incautaban a la audiencia. Sin lugar a dudas Karl Batos y Ralf Hutter tenían esa genialidad de crear varios sonidos novedosos para el mundo que no estaba preparado para escuchar otra cosa que llevara guitarras, bajo y baterías.
“The Model” fue en el que se convertiría en uno de los hits número uno de la banda alemana, ya que internacionalmente estuvo en las listas de los charts de varios países de Europa y Norteamérica, esto llevaba una cierta implicación de un momento subversivo en el mundo del modelaje atraiéndolo hacia la tecnología de un nuevo beat.
Por su parte , “The Man Machine” el último tema del LP, mismo nos muestra una serie de sonidos un tanto futuristas que nos llevan a confundir un cierto pesimismo hacia sobre la música electrónica, pero esto no era sino una metáfora hacia el camino un tanto incierto de las nuevas tecnologías implantadas en la música.