Depósitio Sonoro

20 discos esenciales del IDM

La música electrónica puede ser mucho más que beats repetitivos sin sentido. El Intelligent Dance Music (IDM) es un género de la música electrónica lleno de experimentación, sofisticación y curiosidad que nos ha entregado algunos de los mejores discos de la historia

El IDM un género extremadamente elitista y exquisito, curiosamente llamado así a principios de los años 90 cuando la música electrónica sufría una transición de música electrónica de club a música electrónica de estancia. IDM significa “intelligent dance music” o “música inteligente de baile”, pero tal vez no es del todo así. La verdadera distinción no es tanto en la inteligencia o en conocimientos técnicos, si no más bien el enfoque.

Los productores de IDM generalmente deconstruyen la música de baile y la reconfiguran en una forma de arte más desafiante y compleja. De hecho, no siempre hay algo bailable absoluto. Algunas pistas de Aphex Twin por ejemplo, ni siquiera repiten de forma exacta lo ocurrido segundos antes durante el tema. O Four Tet cuyos sonidos son más sutiles e inquietantes. No hay una sola fórmula para el IDM pero en todos los artistas hay un sentido de sofisticación y curiosidad.

Por esta razón presentamos los 20 álbumes esenciales del IDM. En orden aleatorio.

1.Pan Sonic – Vakio

Mute Records / 1998

El álbum debut de Pan Sonic antes de que Sami Salo abandonara la agrupación dejando a Mika Vainio e Ilpo Väisänen solos. Nombres inusuales en el paisaje sonoro de los noventas provenientes de la fría Finlandia, igual de inusuales que el título del álbum. Un álbum que contiene música electrónica fría despojada de cualquier elemento o accesorio decorativo, que da un guiño a la experimentación con atmósferas ambientales.

 

2. Apparat – Silizium

Shitkatapult / 2005

A pesar que Apparat había lanzado ya dos álbumes previos en 1998 y 2000, algunos EP’s y varios temas sueltos para diferentes compilaciones, Silizium EP fue un esfuerzo, por mucho, el más compuesto y único que incluyó la colaboración de dos interpretes de cuerdas (violín y violonchelo), al cantante Raz Ohara y al saxofonista Hormel Eastwood. El resultado fue algo parecido a lo que Apparat ya había trabajado anteriormente pero con el descubrimiento de que el elemento humano agregado funciona bien a veces y es completamente impresionante en otros casos.

 

3. Jon Hopkins – Immunity

Domino Records / 2013

Un artista prácticamente desconocido en ese momento, Jon Hopkins surgió con derecho propio con su cuarto lanzamiento de larga duración con un álbum que rompió el muro que dividía a la música electrónica inteligente de la música electrónica bailable de audiencia masiva. Un álbum lleno de pensamientos y emociones que se convirtió en el lanzamiento del año para muchos y que a pesar de docenas de otros grandes álbumes de ese año continúa persistiendo en la mente de muchos.

 

4. Plaid – Reachy Prints

Warp Records / 2014

El dúo que durante 25 años al momento del lanzamiento de Reachy Prints había estado produciendo música discreta y bien compuesta, continuaba con esta tradición en su décimo álbum transitando con fluidez a través de una gama de estilos desde la emotividad de los Boards of Canada hasta el riff del sintetizador de John Carpenter, produciendo texturas electrónicas perfectamente sincronizadas.

5. SND – Atavism

Raster Noton / 2009

A lo largo de las 16 pistas de este álbum el dúo compuesto por Mark Fell y Mat Steel realizó un estudio clínico y estéril de los rasgos más simples y rudimentarios de la música electrónica a través de la deliberada sensación de repetición, logrando llegar al simplismo y sencillismo de lo elemental que los hizo ser nominados a varios premios de innovación musical incluyendo el Ars Electronica y la adjudicación del premio Quartz en investigación musical digital.

 

6. Farben – Textstar

Klang Elektronik / 2002

Textstar recopila nueve temas de cuatro EP’s de Farben, considerado el preludio al trabajo de Jan Jelinek y del justificadamente elogiado Loop-finding-jazz-records en donde editó bucles de milisegundos de grabaciones de jazz de los 50 y 60’s y los unió para crear una forma única de microhouse. Sin embargo, en Textstar desplegó un sonido más directo, expansivo y atractivo, profundamente romántico, sensual y conmovedor con elementos de soul de los 70’s creando música de vanguardia y sublime.

7. Matmos – A Chance to Cut is a Chance to Cure

Matador Records / 2001

Andrew Daniel y Martin Schmith formaron Matmos en 1995, en San Francisco. En el año 2001 publicaron A Chance to Cut is A Chance to Cure. Daniel hijo de médicos, al igual que Schmith, cuenta que la idea de este disco surgió tras una conversación con su madrastra, al contarle sobre los sonidos que hacían diferentes partes del cuerpo de un cadaver al hacer una práctica de disección. La idea de ruidos cómicos en un contexto hostil lo intrigó, y así surgió la idea central de este disco. De esa manera premudios de samplers y las autorizaciones necesarias para ingresar a quirófanos con la ayuda de sus padres, el duo se dedicó a registrar sonidos de diferentes intervenciones y procesos dando forma a un sólido album que se escapa de la anécdota que podría suponer un trabajo de este tipo. Aunando accesibilidad y experimentación sin que esta última de vaya de las manos. Mientras corren los minutos del álbum podemos escuchar claramente como es succionada la grasa de un paciente en “Lipoestudio… and so on”, sesiones de fonoaudilogía en “Spondee” o el macrabro sonido de percusión de un cráneo y una columna vertebral de una cabra en “Memento Mori”.

8. Auteche – LP5

Warp Records / 1998

Con una portada sombría y minimalista, LP5 despliega sonidos fragmentados, partículas y protones que dan lugar a una danza frenética sobre un lienzo espacial creando melodías etéreas, abstractas y extrañas, no menos fascinantes, que funcionan casi de forma autárquica en el oyente. Una joya por sí misma de la experimentación sonora.

9. Flying Lotus – Los Angeles

Warp Records / 2008

En su segundo álbum Steven Ellison mezcló de forma intrigante hip hop de izquierda con música electrónica creando música extraña, a veces seductora, a veces intimidante. Musica que a veces evoca imágenes raras de ciencia ficción, un universo aislado, ácido y sucio, o las calles solitarias llenas de grafitis ignorados por los ciudadanos y cargadas de luces neón de Los Angeles.

10. Aphex Twin – …I Care Because You Do

Warp Records / 1995

Ninguno de los temas de este álbum es divertido, quizá suenan anticuados, pero no de una manera atroz. El trabajo de Richard D. James se encuentra fuera de los estereotipos del género electrónico y continúa satisfaciendo a los oyentes más dedicados. Esto se debe en parte, al retorcido sentido del humor de James expresado desde el título del álbum. I Care es una expresión sonora completa del trabajo de James que va desde lo sinfónico hasta lo digital, de lo relajante a lo enervante. Un álbum ingeniosamente construido y jugosamente innovador. Trabajo que colocó a James, según los críticos de música, junto a artistas minimalistas como Philip Glass y Steve Reich de quienes ciertamente fue influenciado, pero su música trata de llegar más allá de ser eso y percibir más allá del sonido en sí mismo.

11. Jan Jelinek – Loop-finding-jazz-records

~scape / 2001

Con un diseño sonoro cálido y minimalista, Loop-finding-jazz-records es un álbum ampliamente aclamado y reconocido como punto culminante de la era de la música electrónica minimalista y experimental de finales de los noventas y principios de los dos miles.

12. Alva Noto – Unitxt

Raster Noton / 2008

Uno de los álbumes más interesantes en la larga carrera del artista alemán Carsten Nicolai y de su sello Raster Noton. A pesar de la completa falta de melodías e instrumentos tradicionales, es un álbum consistente y completamente gratificante, incluso adictivo por momentos, en el que construyó a partir de sonidos simples texturas de audio complejas y abruptas.

13. Four Tet – Rounds

Domino Records / 2003

Grabado durante el 2002 y 2003 en el pequeño departamento de Kieran Hebden (Four Tet) utilizando solo el viejo software descompuesto de una Dell y un arsenal de sonidos que había almacenado desde 1997, Four Tet logró fusionar el IDM de Aphex Twin con el hip hop de Dj Premier para evocar emociones que parecían imposibles de lograr a partir de un surtido aparentemente aleatorio de fragmentos de vinilo. Un álbum que puso a Four Tet a la vista de muchos críticos y oyentes fanáticos de la música electrónica y que a su vez lo convirtió en uno de los artistas líderes y referentes de este género musical.

14. Boards of Canada – Geogaddi

Warp Records / 2002

Quizá dos de los compositores más enigmáticos de la música, Marcus Eoin y Michael Sandison desviaron la dirección y la atención de la música electrónica 1998 cuando su álbum debut, Music Has the Right to Children cayó del cielo. Cuatro años después de este importante suceso, Eoin y Sandison regresaron con Geogaddi para convocar a toda la familia de espíritus musicales que los mantenía en el misterio. Con la fusión de sonidos encontrados en viejas grabaciones de películas y programas de televisión, y ritmos suaves golpeados por profundos beats, Boards of Canada logró crear un álbum lleno de una profunda sensación de melancolía y nostalgia.

15. Mouse on Mars – Vulvaland

Too Pure / 1994

No mucho después de que los dos miembros de Mouse on Mars se conocieron en un concierto en Colonia en 1992, su afinidad musical los llevó a realizar exploraciones musicales llenas de texturas suaves y beats profundos. Como fanáticos del grupo instrumental inglés Seefeel, Andi Toma y Jan S. Werner pensaron en enviar su demo al sello de Seefeel, Too Pure, que finalmente lanzó el álbum debut de Mouse on Mars en 1994. Werner alguna vez confesó que Vulvaland se trataba de una de las producciones más tímidas del dúo, sin embargo, a veces pocas palabras son las más efectivas y hermosas que la excentricidad.

16. Gas – Nah und Fern

Kompakt / 2008

El productor de techno aleman Wolfgang Voigt desde principios de los noventas tomó una ruta circunscrita hacia la experimentación musical de una manera verdaderamente minimalista. Voigt ha hecho de la austeridad una virtud. Nah und Fern es una recapitulación de su trabajo de 1996 al 2000 en donde tomó y procesó pequeños fragmentos de compositores clásicos modernistas alemanes y austriacos hasta dejarlos irreconocibles, únicamente dejando algunos débiles vestigios de sus orígenes orquestales enterrados bajo capas de ambient y sonido estático para crear algo de la mejor y más minimalista música de linaje teutónico.

17. Venetian Snares – Meathole

Planet Mu / 2005

Aaron Funk se abrió camino en el mundo de la música a través de la destrucción y la melancolía, mezclando, cortando, pegando, procesando y alineando patrones de ritmo confusos, melodías oscuras y sonidos encontrados. La música en Meathole se mantiene unida por una serie de estructuras rítmicas complejas en combinación con ritmos continuamente sincopados en constante cambio, creando una atmósfera inusual y una sensación de inquietud para él oyente que recuerda a toda la violencia y agresión que la sociedad civil tiene para ofrecer. Un álbum con un nivel técnico destacable y una pieza notable de música hecha totalmente por computadora.

18. Boards of Canada – Music Has the Right to Children

Warp Records / 1998

Music Has the Right to Children fue el primer álbum de formato largo de los Boards of Canada lanzado comercialmente y probablemente el más conocido de ellos. Se encuentra dentro de la lista de las mejores piezas de música electrónica de la historia y es un referente e influencia de muchos proyectos musicales. Simplemente un álbum que trasciende en la historia musical, de cualquier género que se trate.

19. Telefon Tel Aviv – Fahrenheit Fair Enough

Hefty! Records / 2001

El debut del dúo basado en Nueva Orleans es uno de los álbumes más adictivos que existen en la música electrónica. Una pieza que al entrar al reproductor musical tiene dificultades para dejarlo y esto debido a que grandes músicos orgánicos hacen grandes trabajos de música electrónica. Un álbum limpio y nítido, en el que cada parte está delicadamente elaborada con sonidos supersónicos psicológicamente estimulantes que mueven el ritmo más fino de cualquier composición de computadora portátil.

20. Isolée – Rest

Playhouse / 2002

El álbum debut del productor alemán Rajko Müller sigue incendiado las pistas de baile de todo el mundo. Con “Beau Mot Plage”, Müller se impuso en la escena techno internacional. Un tema que llegó al mundo de la música electrónica poco después de su lanzamiento como una de las producciones musicales alemanas más influyentes desde Kraftwerk. Con Rest, Isolée logró la hazaña de ganarse el corazón de la gente amante de la música de pista de baile y los clubs nocturnos, y de la gente amante de la música reflexiva y de estancia, en general, el corazón de los críticos de todos los ritmos y colores de música.

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