Silencio de Karen y Los Remedios: Un Viaje Sonoro a Través de la Vulnerabilidad y la Experimentación
Silencio (2023), el esperado álbum debut de Karen y Los Remedios, se alza como un testimonio musical de los momentos tumultuosos y reflexivos que han marcado los últimos años. Este ambicioso proyecto, liderado por Ana Karen G Barajas, conjuga la exploración de sonidos tradicionales latinoamericanos con elementos electrónicos en una colección de nueve canciones que abrazan la vulnerabilidad, la introspección y el empoderamiento. Junto a Ana Karen, el grupo cuenta con la colaboración del productor chilango Jonathan Muriel (Jiony) y el guitarrista Guillermo Berbeyer (Z.A.M.P.A.). La historia de Karen y Los Remedios es una de convergencia, donde diversos talentos se entrelazan para dar vida a una propuesta musical única. Una amalgama de influencias y experiencias que abarcan décadas. Ana Karen G Barajas y Jonathan Muriel (Jiony) se cruzaron por primera vez en 2009 a través de un amigo en común. Sin embargo, no fue sino hasta 2016 que decidieron unir fuerzas en el EP de instrumentales Dónde Dormir, publicado por el sello VAA (Varios artistas), del cual Jiony es cofundador. Este sello se especializa en música electrónica que abarca desde el nu-jazz y el techno hasta el funk, el trip-hop y la música latina tradicional fusionada con texturas electrónicas. Por su parte, Guillermo Berbeyer (Z.A.M.P.A.) se ha sumergido en la escena del post-rock y el trip-hop, producido por Rafael Durand y Fernando González. Su proyecto Z.A.M.P.A. también ha contribuido a la diversidad sonora de la banda. La conjunción de estos talentos finalmente dio lugar a Karen y Los Remedios, impulsada no solo por la relación entre los miembros, sino también por su conexión con el sello VAA. Este proyecto se convirtió en un crisol musical, donde se fusionaron una amplia gama de influencias para dar forma a un sonido inigualable. Es por esto que Silencio es un álbum que nace de la vulnerabilidad y la reflexión, particularmente durante los tiempos tumultuosos de la pandemia. La música de Karen y Los Remedios se convierte en una vía para abordar temas profundos y personales. A través de su eclecticismo, las pistas en Silencio tocan una amplia gama de emociones y experiencias humanas. Track por track “Mi Gran Dolor”: La apertura del álbum nos sumerge en una cumbia lenta, donde las emociones turbias de una relación incierta toman protagonismo. La base rítmica de cumbia rebajada se fusiona con sintetizadores, generando una melancolía palpable. La identidad de la cumbia se mantiene a través del órgano, que añade un toque tradicional a la mezcla. “Flama Eterna”: Esta canción, con sus ritmos de merengue rebajado, explora la esencia innata de cada ser humano. La instrumentación se inclina hacia elementos más tradicionales como cuerdas, órgano y bajo eléctrico, equilibrando la presencia de sintetizadores. “Silencio”: Un himno a la libertad y la autenticidad, esta pista adopta la salsa como su inspiración rítmica. El ritmo “dubstepsoso” de las percusiones se combina con un piano lo-fi, evolucionando hacia una balada conmovedora. “Cartas Marinas”: Una apreciación hacia el ser amado se traduce en esta canción. Las congas lentas guían la canción, creando una atmósfera de balada-salsa-psicodélica. El clavicordio y los sintetizadores aportan un toque psicodélico a la composición. “Lágrimas”: Karen y Los Remedios se sumergen en la cumbia tradicional mexicana, especialmente en la variante que se escucharía en bodas. La adición de arpa hacia el final alude a la cumbia andina y explora el tema del fracaso en una relación. “Las Muchachas”: Una oda a la hermandad y la libertad femenina, esta pista fusiona el reggaetón con percusiones de cumbia rebajada. Una sección de metales intermedia añade un giro inesperado. “Tu Felicidad”: Rindiendo homenaje a las cumbias de Monterrey, esta canción presenta un ritmo rebajado y un distintivo acordeón. La letra celebra la felicidad compartida en una relación. “Plexo Lunar”: Esta cumbia downtempo destaca el piano eléctrico, que evoca el sonido del trip-hop. El cambio al piano acústico en el interludio le confiere una autenticidad latina. “Te Pido a Ti”: La balada dream pop de la colección se inspira en las baladas de los años 60 en español. Aborda el autocuidado y la atención a nuestras propias heridas para no lastimar a quienes amamos. “Presagio”: Una cumbia rebajada con un bajo profundo y una base lenta y rasposa que conduce la intención melódica. La canción expresa el deseo humano universal de amar y ser amado. “Canario”: Un tributo a las mujeres, la naturaleza y nuestras madres. El bajo electrónico poco convencional se mezcla con percusiones de cumbia rebajada, ofreciendo un cierre diverso y emotivo para el álbum.