Por alguna extraña razón nunca han venido y no sabemos si algún día lo harán. We have the facts, and we’re voting yes: Hace unos días, gracias a la inmediatez de las redes sociales, me enteré del aniversario no. 15 del único y maravilloso disco de The Postal Service: Gave Up y fue inevitable no pensar en Death Cab For Cutie, y específicamente en Ben Gibbard, compositor y voz principal en ambos proyectos. Little Bribes Pero lo que en verdad llamó mi atención fue que tratando de recordar alguna presentación de DCFC en México, ¡oh sorpresa!, descubrí que NUNCA han pisado tierra azteca y, aunque las razones podrían ser muchas: desde que su booking manager pida lo imposible para traer a la banda, no aprovechar el timing de sus giras en festivales y presentaciones cercanas a México, su capacidad de vender boletos en México (que tiene mucho que ver con cuantos fans cuenta la banda en México, que no son pocos, debo decir), cuesta trabajo entender cómo es que los organizadores de conciertos y/o curadores de festivales en México hayan dejado de lado a tan importante banda del llamado Indie Rock. Sobre todo ahora que la cantidad de festivales aumenta y se diversifica exponencialmente año con año y que permite que bandas incluso más nuevas y con pocos recursos puedan presentarse en venues muy pequeños pero con una exposición mediática a nivel mundial. Y, ¿por qué tanto alboroto por una banda así? Podrían pensar… pues, por varias razones que ahora expongo: This Charming Man Benjamin Gibbard nació y creció en Washington escuchando a las bandas punk de su escena local, desde Bad Brains, Fugazi y Minor Threat, hasta Sunny Day Real State, Scream, Mudhoney, Soundgarden y Nirvana (¡vaya escena!), lo cual lo lleno de bríos para comprar su primer guitarra en 1997, año en el que él solo grabó y editó todos los instrumentos de su primer disco, realizando las maquetas de sus primeras canciones, mezclando y produciendo todo hasta tener como resultado: You can play this songs with chords, un demo grabado en cassette que Ben repartiría con sus amigos durante fiestas, algunas radios locales y universitarias que terminaron por programar un cover muy punk y ultra lo-fi de “This Charming Man”, original de The Smiths. A partir de entonces, algunas radios comenzarían a programar dicho cover y a pedir que “la banda” (a pesar de ser un trabajo solista, Ben ya utilizaba el nombre de Death Cab For Cutie como agrupación) se presentara para algunas entrevistas, por lo que de la noche a la mañana tuvo que reunir a algunos amigos y conocidos para poder interpretar sus canciones en vivo, así surgiría la primer alineación de DCFC para su disco debut Something About Airplanes un año después y para los dos discos posteriores: We have the facts and we’re voting yes y The Photo Album, trabajos con los que ganarían el reconocimiento de la prensa especializada como Spin, Paste y Pitchfork, obteniendo criticas medianamente positivas; pero no sería sino hasta el 2003, tras la salida de dos de sus miembros fundadores: Nathan Good y Micheal Schorr, y la llegada de Jason McGerr, que junto a Christopher Walla y Nick Harmer y Ben, formarían la alineación clásica de DCFC. So, this is the new year!! Hoy en día, es innegable que DCFC es uno de los pilares de la música Indie-Rock de EU, especialmente en Seattle, gracias a una trilogía de discos impecable y soberbia: Transatlanticism Plans y NarrowStairs, pero también ha de reconocerse que fue gracias a la serie de drama juvenil The OC, que su carrera musical se disparó de la noche a la mañana, llevándolos al éxito comercial gracias a que uno de los personajes principales, Seth Cohen, era fan de la banda en la serie (y en la vida real), lo cual justificaba sus reiteradas apariciones tanto en el soundtrack como en la serie. Y es que The OC fue para el género indie (a nivel internacional) lo que Saturday Night Live fue para los actores de comedia norteamericana, o lo que Sub Pop Records fue para la escena Grunge en los 90, un verdadero semillero de talento que le daría vida a todo un género. En otras palabras no se puede hablar de DCFC sin hablar de The OC, o viceversa. Fue casi una relación simbiótica de la que ambos salieron beneficiados. Your heart is an empty room Después del éxito de la banda, Ben se dio el lujo de comenzar una relación con la hermosa e insufrible Zoey Deschanel, conocida en el bajo mundo hipster como “Summer”, con quien contraería nupcias en 2009, justo después de terminar la grabación del increíble Narrow Stairs, mientras su compañera grababa 500 Days of summer. 3 años después firmarían el divorcio. Algunos fans afirman que la mayoría de las canciones del Narrow Stairs están dirigidas a su ex esposa, con quién ya tenía problemas desde antes de su boda, y aunque nadie lo sabe con certeza, canciones como “The Ice is Getting Thinner”, “Your New Twin Sized Bed” y Talking Bird”, bien podrían ser cartas de desamor y decepción dirigidas hacia Deschanel. Así que, de alguna forma, habría que agradecerle a la señorita ser la musa inspiradora del disco más depresivo y azotado de DCFC. Tiny vessels Sin importar su decepción amorosa, Ben continuó su trabajo con la banda, editando 2 discos más de estudio: Codes and Keys y Kintsugi; participando en soundtracks como Twilight (tal vez lo único bueno de esas películas); lanzando su primer disco solista: Former Lives y colaborando con Steve Fisk y AJ Schnack en el documental Kurt Cobain: About a Son; por si fuera poco, volvió a casarse algunos años después con la manager de su banda Rachel Demy; grabó una canción con Foo Fighters para su álbum/documental Sonic Highways, además de compartir escenario con Lauren Mayberry de CHVRCHES en su última gira en norte américa. Todo esto hace de Death Cab For Cutie, una banda que se debe ver y