Tras casi 3 décadas de cruenta guerra civil desde 1975 y hasta 2002, cuando Angola se independizó de Portugal, los góticos comienzan a verse por las calles de la capital Luanda. Una entrevista con uno de ellos enseña su mundo. Angola, es un país ubicado al sur de África que tiene fronteras con Namibia por el sur, con la República Democrática del Congo y la República del Congo por el norte y con Zambia por el este, mientras que hacia el oeste tiene costa bañada por el océano Atlántico. Su capital es Luanda y tiene alrededor de 5 millones de habitantes. Matthew Cardoso es un adolescente gótico que vive en Luanda, Angola. Respondió a una entrevista del blog brasileño especializado en subculturas Moda de Subculturas (MdS) y describe toda una naciente y sorprendente escena de góticos y góticas en un país del que ya teníamos información de sus bandas de death metal gracias al documental Death Metal Angola (2012), de Jeremy Xido. Tras 27 años de una cruenta y despiadada guerra civil, comienzan a surgir subculturas. Tanto la entrevista como las imágenes han sido tomadas del blog MdS. ¿Cómo es ser alternativo en Angola, existen prejuicios? ¿Cómo está la cuestión musical? Principalmente, cuando nos juntamos en lugares públicos la gente siente miedo. No quieren informarse y saber por qué uno es así o lo que sea. Muchos amigos de la infancia de fueron alejando de mí porque no tengo los mismos gustos que ellos. Hay prejuicios, sí, como en cualquier otro país, pero no dentro de la escena. Nos juntamos los primeros sábados del mes y ahí tenemos nuestro rollo. ¿Crees entonces que los alternativos en general son marginados en Angola? Sí, absolutamente. La sociedad angoleña aún no está preparada para algo así. Además de los góticos y heavies, ¿sabes si también hay punks por ahí? ¡Punks somos nosotros! No, es broma. No hay punks aquí. Hay jóvenes que disfruta de esa música, pero solo del sonido, y no va más allá. ¿Y las chicas, conoces góticas o chicas de otras subculturas? Hace años había muchas chicas en la escena, pero muchas se quedaron por el camino. ¿La escena postpunk / gótica de la que formas parte es grande o pequeña? No es muy grande. Seremos unos quince o así. ¿Cómo es la cuestión del prejuicio estético, la gente se burla o os miran mal? Ni se acercan. Para ellos somos demonios. Los religiosos nos miran mal, pero nunca hemos sufrido ningún ataque físico. ¿Y la ropa, son ustedes mismos quienes la fabrican? Sí, la hacemos nosotros mismos. Algunas veces partimos de dibujos que hacemos nosotros. Hay bandas que tienen un logo muy complicado. Entonces sacamos copias y las recortamos. ¿Visten así incluso con el calor? Creo que el clima de Angola no es tan diferente del de Portugal. Angola es un país muy caluroso, pero no nos importa… ¡todo por la escena! ¿Están involucrados en política o los encuentros son solo para reunirse y escuchar música? En nuestros encuentros la gente habla más de la escena, compartimos bandas nuevas, hablamos con los recién llegados o compartimos fanzines que cada uno hace. NOTA ORIGINALMENTE PUBLICADA EN EL SITE BRASILEÑO MODA DE SUBCULTURAS.
