Depósitio Sonoro

26 marzo, 2019

Daughter of Satan celebra un año de existencia con Broken English Club

Empezar de cero y llegar a ser el ave fénix, ahí está el poderío de Daughter Of Satan por crear y generar nuevos espacios, nuevos sonidos que hasta hace no mucho no contaban con una fiesta o magnitud de tal sistema, nuevos capítulos, nuevas metáforas y nuevos equilibrios en la capital sonora de la ciudad, todo por amor a la música.   Alex Dellarge y Arantza Jimenez crearon este concepto, según recuerdo Arantza me contó que cuando llegó a radicar a CDMX proveniente de Barcelona, lo que más deseaba era que hubiera fiestas con música que a ella le encanta y así nació ese espíritu. En Depósito Sonoro hemos tenido la oportunidad de estar en todas las fiestas desde aquel primer destello en donde Silent Servant fue el padrino estelar. Algo muy increíble es que los amigos se dan cita en un despertar pleno en la pista de baile para bailar. Hemos visto como cielos tormentosos han arropado sus noches de locura, intensidad, inventando el futuro de lo que parecía incierto en una escena tan a veces atacada por prejuicios como lo es la escena darks nacional en donde hasta entonces no había la oportunidad de ver a artistas de tan increíble calidad y en este primer año el elegido es Broken English Club. Hemos visto como gente ha dejado mil suspiros durante este primer año, hemos visto como esas pequeñas ramas ahora son un árbol entero dando aire a un circuito encendido al cual llamamos: música electrónica y sus derivados. Encontrando refugio en un punto del laberinto que ha tejido historias que no habremos de olvidar nunca volviéndonos parte de lo etéreo e infinito a la vez, y sí, todo por amor a la música como siempre lo ha definido cada episodio de Daugther of Satan, desde aquella noche con Mannequin Records, el sold out con Schwefelgelb o su increíble noche de muertos, entre sus fiestas más destacables  en donde siempre ha habido un vínculo con  el post-punk,  tecno-industrial, el EBM, el dark wave o el minimal synth wave,  oscuros, limpios y claros. Felicitamos a Daughter of Satan por ser un pequeño oasis en esta gran ciudad que estamos seguros seguirá ofreciendo fiestas memorables . No se pierdan la siguiente psicosis de lo abstracto a lo extraño con Broken English Club, Petra Flurr + 89s, Dellarge y Las Brisas.  

Daughter of Satan celebra un año de existencia con Broken English Club Leer más »

La música en tiempos del Yo: descarga y comparte

“Si bien algunas personas pueden no estar conmigo ahora, los discos que escuchamos juntos, están todos aquí en mi pequeña caja blanca de recuerdos, todos amorosamente copilados y curados, esperando el momento en que podría volver a necesitarlos.” –Dylan Jones. IPod, Therefore I Am David Byrne cuenta cómo la música al ser grabada, comenzó a tocarse para las grandes salas, clubs y radios. Incluso como el hip hop está pensado para las bocinas en las cajuelas de los autos, y así, los graves y agudos se acoplen a la acústica las partes traseras de los autos. Incluso nos dice la forma en la que las aves han cambiado sus sonidos y cantos de acuerdo a que los cambios que sufren sus entornos y contextos. Un ave de San Francisco, no canta igual a un ave del bosque y a su vez, esta tampoco lo hace que un ave de mar. Todo lo sonoro cambia de acuerdo a su contexto. Después Brian Eno, comentaba el origen de la música ambient, cuando el famoso pianista francés Eric Satie, componía Gimnopedias para que apenas se notara y se integraran a los ruidos de los cubiertos, platos, vasos, voces y demás ambientes sonoros del restaurante donde tocaba los viernes por la noche. Esto me hace pensar que en algún momento, la música se integraba a los demás sonidos del mundo, ya sea en el metro, un camión, por la avenida más transitada o un parque. No estoy seguro que la música siga siendo parte de ese ambiente. El mundo gira y las formas de consumo también. La música sufrió cambios significativos a finales del siglo XX y en la primera década del mismo. En la era digital en la que vivimos, es importante señalar la desmaterialización de la música.  El MP3, YouTube, Itunes, el Ipod y ahora el streming con plataformas como Spotify o Deezer. Tal vez, comenzó con el CD player, que ya brindaba la oportunidad de cambiar de una canción a otra, de adelantar la pista, de pausar o repetir una pieza, cosa que con el casete sucedía, pero era tardado y tedioso, y con el vinilo, era prácticamente imposible. Todas las plataformas de consumo de música que mencioné anteriormente, son una maravilla en muchos casos, pero sin duda, trajo consigo nuevas formas de ver el mundo y entenderlo,  también, por supuesto, de contemplar la música. El Ipod, el MP3 o el streaming brindan las posibilidades de llevar tu colección de música en un pequeño rectángulo, una radio que programa perfectamente lo que quieres escuchar, de acuerdo al contexto, a tu estado de ánimo, en el lugar y tiempo que lo desees. Incluso ya existen playlist prediseñadas a tu estado de ánimo y actividad, como si fuera una radio personalizada.   La radio ofrece un sentido de sorpresa, a diferencia de los cientos y/o miles de canciones descargadas. La cultura de la descarga ha dado en vuelco en las formas de consumo ¿Acaso nos acercamos al perfil de un archivista compulsivo capaz de descargar, seleccionar y ordenar de forma casi neurótica la información que se brinda en la red, a la de un escucha amante de la música? Los accesos son inmediatos, y las herramientas para ordenar ésta información nos hacen todo más fácil, con un click nuestros discos o pistas están perfectamente ordenados por alfabeto, o por cuestione más snob que uno puede elegir. Comencé citando a Eno y su comentario sobre Satie, porque hoy en día, me parece que la música no se integra a los demás sonidos del mundo, al contrario, se aíslan y nos aíslan ¿Hay algo más antisocial que los audífonos en volumen alto para caminar por la ciudad? Al final “I”pod y “I”tunes es una señal clara de que el yo manda, mi música cuándo yo lo decido y dónde yo lo decido. Hace una semana me quedé sin internet por algunos días, y a pesar de contar con varios días de música en el Itunes, una pila de alrededor 100 Cd´s y otra de 300 casetes, sumando las 230 canciones que carga mi celular que reproduce MP3, me sentía incompleto en el sentido musical, me di cuenta que el Deeze lo es casi todo para mí en términos musicales, a través del Deezer descubro y reincorporo lo que necesite escuchar en ese momento. Puedo encontrar las lo que necesite: diferentes versiones de alguna canción o banda, covers, versiones en vivo o ediciones singulares, y por si fuese poco, todo se puede descargar, lo puedo llevar y curar a mi antojo y reproducir en mi computadora a la hora de trabajar, en la ducha o en el metro, siempre mi música y yo. Tal vez la era del MP3, el Ipod y la cultura de “descarga y comparte”  han sido la de cambios más radicales para la música y su forma de consumo, hoy en día el deseo es reducido a unos cuantos segundos en lo que carga nuestra plataforma preferida para escuchar música ¿Será que estamos en un proceso de extinción de la contemplación de la música al tenerla tan a la mano? Perdidos en la música, intentando escuchar todo lo posible, intentando absorber los accesos y los ritmos. A veces basta poner todo en “aleatorio” y listo, no tendremos que decidir qué escuchar, delegamos la responsabilidad a un rectángulo digital, dueño de nuestras más íntimas colecciones, que como dice Jordi Soler: a veces tengo la tentación de pensar que el aparato, esa hermosa maravilla tecnológica a la que van todos enchufados, importa más que la música que reproduce.  

La música en tiempos del Yo: descarga y comparte Leer más »

“Electric Lady Sessions”, el nuevo disco de versiones en vivo de LCD Soundsystem

LCD Soundsystem es de esas bandas que surgieron a principios de los dos miles y que consiguieron que la música experimental se bailara y viviera como si fuese una especie maquinaria de hedonismo sonoro continuo. El proyecto liderado por James Murphy presenta luego de la sesión The Long Goodbye: LCD Soundsystem Live At Madison Square Garden (2014), una nueva versión en directo intitulada Electric Lady Sessions (DFA/Columbia Records). “Electric Lady Sessions” es un material que se grabó en el estudio que fundó el guitarrista Jimi Hendrix en las cercanías de Greenwich Village (NY) en los años 70, lugar que pisaron figuras como David Bowie y Patti Smith. Dicho trabajo tiene un inicio demoledor con el cover “Seconds” de The Human League, el cual se conjuga de manera brillante con “I Want your Love” de Chic y “(We don’t Need This) Fascist Groove Thang” de Heaven 17. Por otro lado, también se rescatan algunas canciones del American Dream (2017), This is Happening (2010) y el Sound of Silver (2007), en donde capturan los ritmos infecciosos del dance-punk característicos de la agrupación neoyorquina. Este trabajo revela la fuerza que LCD Soundsystem tiene en vivo a través de su estilo musical único, dados los arreglos texturizados y el mejoramiento de algunos tracks gracias al trabajo de producción. En sí el álbum podría considerarse como una de las más sobresalientes sesiones que el proyecto tiene en vivo, ya que mantiene una energía elevada y logra recordar a sus escuchas los éxitos que ha tenido a lo largo de su intermitente e irregular carrera.

“Electric Lady Sessions”, el nuevo disco de versiones en vivo de LCD Soundsystem Leer más »

Scroll al inicio